Premio de carne, hueso y corazón.





Dicen que la verdadera educación es la que deja huella y todos vosotros me habéis dejado una huella imborrable. Estoy muy contento por el primer premio "Joaquín Sama" pero, ¿sabéis una cosa?

El mejor premio que se puede llevar un maestro es el cariño de todos vosotros. Y ese premio es incomparable porque no se exhibe en una estantería o está colgado en una pared pillando polvo.
Ese "premio" está grabado en lo más profundo de mi corazón.
Por circunstancias no puedo continuar con esta clase pero sigo en nuestra preciosa ciudad, por tanto no os vais a librar de mí tan fácilmente.

No tengo palabras para agradecer todos los intentos que habéis hecho para que se renovara la comisión y el interés.
Sé que dejo la clase en buenas manos y deseo que sigáis siendo tan colaboradores y atentos en la educación de vuestros hijos e hijas.

Me llevo todos los recuerdos y momentos de este curso tan especial.
Soy un gran afortunado por varias razones:

- Trabajar en lo que me apasiona.

- Encontrarme con unos chavales con tantos talentos y padres que alientan y potencian lo trabajado en el aula.

Quizás nos volvemos a encontrar en el camino.

"Educar la mente sin educar el corazón no es educar en absoluto "


Vuestro "teacher" Ismael, SIEMPRE.

Comentarios

Entradas populares