Hace falta valor...

"Hace falta valor, ven a la escuela del calor... ", decía la popular canción.

Esa parte del estribillo la podemos aplicar     en el "acalorado " debate. Los centros educativos son los únicos edificios públicos que no reúnen las condiciones legales y seguras para trabajar y con el agravante que son niños. No vamos a entrar sobre el rendimiento porque es sabido, desde siempre, que cae en picado mientras la temperatura sube. 

Esperemos que la cordura dé una respuesta "fresca " a este problema. Mientras tanto nosotros,desde la ilusión, damos la vuelta a la tortilla. La clase es un centro turístico con su chiringuito pero esta mañana hemos " viajado " al porche. ¿Por qué? Sencillamente se sale de la rutina, hacía fresquito y era un sitio perfecto para estar relajado para leer o hacer unas actividades de lectura.

De verdad, se estaba en la gloria y vamos a repetir la experiencia.

Después del recreo vamos a realizar talleres creativos y hoy hemos empezado a elaborar estos imanes:

Intentemos con todo el ingenio sobrellevar estas calores...

¡Y todavía hay gente que cuestiona el cambio climático!